miércoles, abril 16, 2008

Anunciad su Venida-CUANDO DIOS CUBRE LAS DEFICIENCIAS

Anunciad su Venida - 17 de abril

CUANDO DIOS CUBRE LAS DEFICIENCIAS

Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios. (2 Cor. 6: 1).

Debemos participar en la obra de Dios en todo el mundo; doquiera haya almas que salvar, debemos prestar nuestra ayuda, para que muchos hijos e hijas puedan ser traídos a Dios. Él está cerca y por esto debemos aprovechar al máximo toda habilidad que se nos haya confiado y todo medio que ofrezca ayuda para la obra.

Cómo se sentirán los ángeles al ver que el fin se acerca mientras muchos de aquellos a quienes se ha confiado el último mensaje de misericordia se apiñan para asistir a reuniones en beneficio de sus propias almas, y se sienten insatisfechos si no hay tanta predicación, mientras se preocupan poco por la salvación de los demás y están haciendo poco en este sentido también. Todos los que están realmente unidos con Cristo por medio de una fe viviente, serán participantes de la naturaleza divina. Estarán constantemente recibiendo de él vida espiritual, y no podrán permanecer silenciosos.

La vida siempre se manifiesta mediante la acción. Si el corazón está vivo, enviará sangre a todas las partes del cuerpo. Los que tengan el corazón lleno de vida espiritual no necesitarán que se los inste para que lo revelen. La vida divina surgirá de ellos en ricos raudales de gracia. Al orar, al hablar y al trabajar, glorifican a Dios.

No es el más brillante ni el más talentoso aquel cuya obra produce los resultados más grandes y más duraderos. ¿Quiénes son los obreros más eficientes? Los que responden a la invitación: "Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón" (Mat. 11: 29).

Si los hombres a quienes Dios ha confiado talentos intelectuales se niegan a usar esos dones para su gloria, después de probarlos los dejará que sigan su camino y tomará hombres que no parecen estar tan ricamente dotados, que no tienen tanta confianza propia, y hará fuertes de los débiles porque confían en que Dios hará lo que ellos no pueden hacer por sí mismos. Dios aceptará el servicio prestado de todo corazón, y cubrirá las deficiencias.

Los ángeles están atentos para oír qué clase de informe dáis al mundo acerca de vuestro Señor. 114

¡HE AQUI EL SEÑOR VIENE YA; SALID A RECIBIDLE! - ¡VEN, SEÑOR JESUS! (Mat. 25: 6; Ap. 22: 20)